Ellie creció sin poder tener un sitio al que llamar hogar.
Desde los cuatro años de edad vivió con su abuela, en varios pisos, incluso en ocupaciones ilegales. Llegó un momento en que su abuela creyó que ya no podía cuidar de Ellie y la envió a vivir de nuevo con su madre.
La madre de Ellie se trasladó con ella a vivir con su entonces novio, pero huyó de él después de que éste se convirtiera en una pareja violenta que abusó de ella y de Ellie. Pasaron los próximos años de ciudad en ciudad. Durante este tiempo, Ellie fue sometida a abusos emocionales y sexuales por parte de las sucesivas parejas de su madre. Entonces, cuando tenía sólo 15 años, la madre de Ellie la dejó sola en Sheffield, huyendo a otra ciudad.
Cuando Ellie llegó por primera vez a Depaul estaba embarazada de ocho meses, sin un sitio al que llamar «hogar», sin pertenencias y sin apoyo de familiares o amigos. Depaul en Sheffield le dio alojamiento y, a través del apoyo, Ellie desarrolló las capacidades para controlar su vida, reconstruir su confianza y la capacidad de planificar su propio futuro sin tener miedo.Trabajó con una enfermera familiar para aprender las habilidades necesarias para criar y cuidar de su bebé.
Depaul ayudó a Ellie a tener un piso a tiempo del nacimiento de su hijo, y ahora, por primera vez en su vida, tiene su propia casa. Ellie se dedica a ser una gran madre y a construir una vida para ella y su hijo. Se ha unido a un grupo de apoyo para padres, en donde se encuentra con otras madres primerizas y recibe apoyo en su maternidad.
Tanto la mamá como la abuela de Ellie tuvieron hijos a los 15 años, y nunca terminaron la escuela o tuvieron un trabajo. Ellie está decidida a no seguir sus pasos. El mes pasado inició un curso de la universidad y tiene una plaza para su hijo en una guardería local, mientras que ella está en las clases.
Todo el mundo en DePaul le desea a Ellie toda la suerte del mundo. ¡Estamos seguros de que ella tiene un brillante futuro por delante!
Fuente: DepaulUK
0 comentarios