27 de febrero: Fiesta de la beata Francinaina Cirer i Carbonell
El 27 de febrero la Familia Vicenciana y toda la Iglesia celebra la fiesta de la beata Francinaina Cirer i Carbonell, natural de Sencelles, Mallorca (España).
Nació en la localidad española de Sancellas, siendo bautizada el 1 de junio de 1781 como Francisca Ana. Pertenecía a una familia de campesinos, en la que ayudaba a sus padres y a sus tres hermanos mayores en las labores del campo y de la casa. Desde la niñez se sintió llamada a consagrarse en la vida religiosa. Muy a pesar suyo, se lo impidieron innumerables y variadas dificultades. A los 26 años, fallecida su madre y sus hermanos, Franciscana vivía junto a su padre en la casa familiar. Además se encargaba de todas las tareas del campo y domésticas además de los cuidados a su progenitor, quien falleció en 1821. A su muerte Franciscana tenía cuarenta años, se reafirmó en su proyecto de dedicar su vida a Dios y a los demás. Decidió llevar una vida de retiro en su casa, donde vivía en compañía de otra mujer, Magdalena Cirer Bennazar, la cual permanecerá junto a ella hasta su muerte. En el pueblo de Sancellas era popularmente conocida como «Sa Tia Xiroia».
Hermanas de la Caridad
En 1850 el rector de Sancellas, Juan Molinas, decidió establecer en la localidad una casa de caridad, en el espíritu de la comunidad de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul. Encargó la dirección de esta nueva orden a Franciscana, quien ofreció su casa y sus bienes para la nueva orden. El 7 de diciembre de 1851 hizo, junto a otras dos mujeres, los votos en la nueva congregación, tomando el nombre de Franciscana de la Virgen de los Dolores.
En la casa convento solía instruir y educar a niños y a jóvenes, a pesar de ser analfabeta, en la fe cristiana. Ofrecía consuelo a pobres y enfermos y ayudaba en el límite de sus posibilidades. Orientaba y aconsejaba a las niñas, y a cualquiera que se lo pidiera sin importar su sexo o clase social y asistía a los moribundos.
Falleció el 27 de febrero de 1855 como consecuencia de un accidente cerebrovascular, personas de todas las clases sociales rindieron homenaje a la hoy Beata que fue sepultada en la cripta del Convento de las Hermanas de la Caridad de Sancellas.
El Papa Juan Pablo II la beatificó en Roma el 1 de octubre de 1989.
Conozca más de su vida en este artículo: Sor Francinaina Cirer i Carbonell
Los vicencianos P. Joe Agostino, CM y Javier Chento se reunieron con su congregación en la primavera de 2019 como se describe en este artículo anterior de .famvin:
Citando este artículo:
Muchos caminos conducen a la encarnación del carisma. Cada congregación ha recorrido un camino diferente que está marcado por el deseo de servir a aquellos que viven en la pobreza, desde el espíritu de San Vicente de Paúl. Esta realidad nos abre los ojos a un hecho importante sobre nuestro Movimiento Vicenciano: somos muy diversos y debemos reconocer y celebrar esta diversidad en la experiencia vivida como Familia en todos los países en los que trabajamos.
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