Mirando al Sol

Mirando al sol
nace una nueva esperanza,
esperanza que ayuda
al temblar el cielo
transformado y desconocido.

La unión entre los seres
da la confianza al consuelo
para cobijar y acoger al desconocido.

La compasión y el deseo
de ayudar abre caminos
pero, también, caminar
los olvidados y los desconocidos.

Pero todo eso nos enseña
a ser perseverantes
siempre luchando por
seguir adelante.
Solo que hoy con una mirada
más limpia y un reflejo
transparente, con dos manos
para ayudar, para dar,
para luchar, para orarle a Dios
y pedirle ¡Qué sea su voluntad!

Vientos, mares y tierra,
fieles compañeros
de nuestra Madre Naturaleza,
nos demuestran que siempre están unidas.

Ellos nos hacen la pregunta
¿Por qué los humanos
no están unidos
si son tan débiles?

Madre Naturaleza
que prestas tus cerros y volcanes
para enseñarnos cuán feroz,
compasiva y hermosa puedes ser.
Muestras cuán insignificantes somos
y aún así tenemos el descaro
de creernos tu dueño, en vez de
arrodillarnos y rogar a Dios ¡Piedad!

Recordar que somos hermanos,
que nuestra fortaleza se refleja en la unidad,
se manifiesta en la caridad,
pero nuestra fuerza
viene de Dios que es Amor.

Judith Melaine Guerra de Agreda
(SSVP El Salvador)