Serie de vídeos de Cuaresma: Día 41, Domingo de Resurrección
¡Feliz Pascua de parte del Padre Aidan Rooney, CM! Hemos llegado al final de nuestro itinerario de Cuaresma. ¿Qué sabemos ahora que no sabíamos cuando empezamos? ¿Has adquirido alguna idea sobre cómo puedes poner en marcha tu oración? Aprende a dejar que Dios te busque, te domine y te envíe. El objetivo de la oración es dejar que Dios entre más profundamente en tu vida para examinarte. Permitir que respondamos a la llamada de Dios con la misma actitud que la Virgen, y decir: hágase en mí, según tu palabra.
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Nota: los videos son en inglés, pero ofrecemos la traducción al español a continuación del video.
Transcripción:
Hemos llegado al final de nuestro itinerario de oración cuaresmal. Y es un buen momento para preguntarnos: ¿Qué sabemos ahora que no sabíamos cuando empezamos? Realmente es una invitación a que reconozcamos que Dios está presente en todas estas realidades. Y esa realidad me invita a una relación profunda con Él, porque Dios está aquí. Tener el valor de decirle, derriba ese muro, oh Dios. Cambia lo que hay que cambiar en mi vida o dame el valor de hacerlo yo mismo. Rómpeme si es necesario. Envíame a las profundidades y confío en que me sacarás de ellas. Y entonces, oh Dios, te serviré para lo que quieras. Envíame a donde quieras. Iré, porque he aprendido a confiar en ti permitiéndote entrar, permitiendo que me cambies, y permitiendo que seas el conductor de mi vida. Así que sí, búscame, quebrántame, envíame. Soy tuyo. Ese es el objetivo de la oración. Deja que Dios entre más profundamente en tu vida para ver lo que hay. Tus heridas, tus esperanzas, tus sueños, tus sufrimientos. Todo lo que está alojado en tu corazón, por lo que has pasado este último año, o durante toda tu vida. Y poder responder con un eco rotundo de la respuesta de la Virgen María: Hágase en mí según tu palabra. Que Dios te bendiga, y mantenga tu oración en movimiento.
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