Y se llegó el gran día, para celebrar con calor familiar a nuestro santo fundador, san Vicente de Paúl. Ante todo, damos gracias a Dios por habernos permitido un año más de celebración del Carisma Vicentino y gracias a la disponibilidad de cada uno de los participantes, logramos disfrutar de los momentos que se programaron, especialmente para los jóvenes, quienes son nuestro presente y nuestro futuro.

Iniciamos el evento con el protocolo de entrada organizado y dirigido por los seminaristas de teología, MISEVI y JMV. Entrando al salón se podía ver el derroche artístico del equipo de trabajo dirigido por sor Josefina, quien mantuvo en secreto la gran sorpresa (arreglos florales del salón hechos con material reciclable) hasta el día del evento. Fue hasta ese momento que comprendimos por qué guardó tanto hermetismo ante nuestros intentos de comunicarnos con ella, antes del evento, para saber en qué le podíamos ayudar para dicho arreglo.

Posterior al protocolo de entrada, escuchamos las palabras de bienvenida de la presidenta de FAVISAL, quien con gran jubilo y emoción nos instó a trabajar mano a mano en los diferentes proyectos propuestos este año por el P. Tomaž Mavrič, C. M, para el bien de Nuestros Amos y Señores los Pobres. También hizo la presentación de la Escuela de Teología. Seguidamente invocamos la bendición de Dios por medio de sor Adilia (hermana sirviente de la Casa San Jacinto), quien con gran esmero nos llevó a una reflexión profunda del evangelio, de forma dinámica al pedir por los diferentes tipo de pobreza que la humanidad experimenta, como un recordatorio de nuestra misión por esta tierra, concluyendo con la oración propuesta por FAVILA, para rezar por la Familia Vicentina.

Al terminar la oración, sor Guisella Reyes (Casa Santa Sofía, San Miguel), activó el Encuentro con una magnifica dinámica de integración, en la cual se procuró que todos los participantes se integraran e interrelacionaran a través de cintas de colores colocadas en la parte posterior denlos gafetes elaborados por JMV, desde el momento de la inscripción, con el único propósito de propiciar la interacción entre miembros de las diferentes Ramas Vicentinas.

Al finalizar la dinámica conducida por sor Guisella Reyes, nuestro hermano Stuardo Marroquín nos facilitó el tema del Encuentro: “Desplazamiento Forzado”, quien con gran entusiasmo y creatividad nos hizo reflexionar por medio de un mapa de El Salvador, nuestros orígenes históricos familiares en los cuales visualizamos la existencia de familiares migrantes. Todo con el propósito de concientizarnos tanto a nivel personal, familiar y como Familia Vicentina, sobre la importancia de atender esta nueva miseria que experimentan nuestros pueblos y por ende la urgencia de atenderle prontamente “Como si fuésemos a apagar un fuego”. Seguidamente al tema disfrutamos de un rico refrigerio proporcionado por AIC.

A continuación del tema, se realizó el concurso de Acróstico, donde los jóvenes de JMV nos deleitaron con su presentación dinámica. También se presentaron los acrósticos enviados por los diferentes integrantes de las Ramas Vicentinas entre ellos el del seminarista Oscar Efraín Ramírez, quien plasmó en su presentación fotografías de las diferentes pobrezas vividas en nuestros países centroamericanos.

En el caminar de la jornada, sor Guisella dinamizó nuevamente el evento con un divertido juego de rompe cabezas, sobre la casa común; en el cual, despertó al niño que todos llevamos dentro.

Esto nos preparó para la gran sorpresa del día, conducida por el seminarista de segundo año de teología Oscar Efraín Ramírez García, quien por medio de un juego virtual (Kahoot) nos llevó a refrescar los datos anecdóticos de san Vicente de Paúl. Fue fascinante ver cómo adultos y jóvenes interactuaban en la búsqueda de dar respuesta desde sus celulares a las preguntas planteadas en el juego. Por otro, lado se hizo ver a nuestros jóvenes que también podemos conocer de nuestro Carisma Vicentino, por medio del mundo cibernético de nuestro tiempo.

Nuestro evento concluyó con la Santa Eucaristía, precedida por el provincial de América Central P. Rafael Antonio Presidente Arévalo, CM y concelebrada por nuestro Asesor Nacional de Familia Vicentina en El Salvador, el P. José Ramón Mendoza, CM y nuestro recién ordenado Diácono William Guillén, CM.

No podemos dejar de lado el exquisito almuerzo hecho por manos salvadoreñas, donde no faltaron las deliciosas tortillas elaboradas por mujeres de nuestro querido San Jacinto.

Rosa María Araujo, presidenta de FAVISAL.
Larry José López Toruño, seminarista CM, secretario FAVISAL.
Sor Ana Rosa Morán, HC, asesora FAVISAL.
P. José Ramón Mendoza García, CM, asesor FAVISAL.