Evangelio y Vida para el 2 de octubre de 2019
“Sus ángeles contemplan el rostro de mi Padre”
Neh 2, 1-8; Sal 136; Mt 18, 1-5.10.
Hoy celebramos a los ángeles custodios. ¿Quiénes son estos seres? Son seres espirituales (CIC §328), son criaturas (Col 1, 16), servidores de Jesús (Mt 4, 11) y mensajeros de Dios. Debido a su naturaleza espiritual, los ángeles no pueden ser vistos ni captados por los sentidos. En el siglo IV el arte religioso los representó con forma o figura humana. En el siglo V se les añadieron las alas como símbolo de su prontitud en hacer la voluntad divina y porque podían trasladarse de un lugar a otro sin la menor dificultad.
¿Cuál es la misión principal de los ángeles? La misión de los ángeles es amar, servir y dar gloria a Dios, ser sus mensajeros, cuidar y ayudar a los hombres. Ellos están constantemente en la presencia de Dios, atentos a sus órdenes, orando, adorando, vigilando, cantando y alabando a Dios y pregonando sus perfecciones. Los ángeles nos protegen, nos defienden físicamente y nos fortalecen. Además nos comunican importantes mensajes del Señor en determinadas circunstancias de la vida. En momentos de dificultad se les puede pedir luz para tomar una decisión, para solucionar un problema, actuar acertadamente o descubrir la verdad.
Oración: Ángel de mi guarda, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día, no me dejes solo que me perdería hasta que esté en los brazos de Jesús, José y María. Amén.
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Antonio G. Escobedo Hernández C.M.
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