Día de Oración y Ayuno Vicentino
Martes, 25 de febrero 2014
Cristianos  Olímpicos Medalla de Oro  – Credo – Ayuno – Preparándose

Querida Familia Vicentina: ustedes son tan especiales. Nadie es más especial que usted y usted no es más especial que los demás, ¿pero que son los seres especiales? Les recuerdo una vez más que hay que mirar en el reflejo del espejo y ver la creación especial de Dios. Él dijo que no eras más que bueno, sino muy bueno. Comience su día sabiendo lo bueno y especial que usted es. Pierda cualquier celos o resentimiento que pueda tener y saber que es especial. Todos lo somos. Somos especiales siempre, incluso cuando no somos capaces. Dios nos ama. Oremos en este día de hoy. Gracias a Dios por el don de cada uno de ustedes. Gracias a Dios por la creación.

Cristianos Olímpicos Medalla de Oro: Concéntrese en su fe y gane la medalla de oro. Ponemos tanto en tantas cosas, a veces ponemos nuestra fe en un segundo plano. Creo que hay que trabajar en ella al igual que los olímpicos hacen para recibir el oro. No dejar de intentarlo hasta que seamos los ganadores de medalla de oro en nuestra jornada de fe. Debemos ser sinceros acerca de las cosas en todo lo que decimos y hacemos, con el foco en ser el mejor cristiano que podemos ser y sería aún mejor si todos en esta competición fuéramos los ganadores de la medalla de oro. Este sería el camino de Cristo y el mundo nos vería como uno e incluso estaría con nosotros en el  podio Olímpico de Dios, presentando la mejor medalla de oro de ¡todos los tiempos!

El Credo – El Credo es una enorme oración en nuestra fe, para mí sólo superada por la oración del Señor. Es el fundamento de lo que somos como cristianos católicos y un símbolo definitivo de nuestra fe. Es especialmente importante para los Vicentinos para recordar que estamos en el servicio a los necesitados y los que nos rodean. Esta cita de la Santísima Rosalia Rendu es muy apropiada todo el tiempo, pero sobre todo porque servimos unos a otros y a aquellos en situación de pobreza. “Si quieres que alguien nos ame, debemos ser los primeros en amar, y si no tenemos nada que dar, darnos nosotros mismos». Mantenga las oraciones y las citas textuales con usted así como usted respeta la vida, a los destrozados, a los presos, a los agradecidos, a los ingratos, a los sin techo, a los sucios y los necesitados de nuestro amor. ¿Cómo responderemos? Recuerde que nosotros servimos a Cristo.

Un poco más pensamientos para el CREDO:

• Creo que, como Vicentinos, la Caridad y la Justicia van ambos de la mano mano. Debemos tratar a todos por igual y compartir los bienes de todos. Cita de Vincent: “Sólo el Espíritu de Dios, que habita en su sagrada persona, podría unir la justicia con la caridad”.

• Yo creo que no tenemos que cambiar a los demás, sino aceptarlos como son.

• Creo que no importa cómo vayan las cosas buenas, es probable que se lastime y, a veces, es por alguien cercano a usted. Perdonare, orar, tener esperanza, amor y  ¡CREER!

• Creo que los que parecen ser exactamente como nosotros no lo son y, a veces se ve una situación totalmente diferente en relación a lo que nosotros hacemos y CREO que los aceptamos, lo celebramos y oramos por las diferencias.

El ayuno – No hablamos mucho de esto. Nuestro Día Vicentino de oración incluye  también el Ayuno. Martes es el día que fue elegido, sin embargo, el día no es tan importante como la oración y el ayuno mismo. Como Vicentinos, oramos por aquellos a quienes servimos y sí, a veces oramos por los recursos para ayudar a los que servimos. La oración funciona mejor si de verdad ayunamos. No para mostrar a los demás lo que ofrecemos en sacrificio, sino que ayunamos para los ojos de Dios. Creo que para las mujeres el más duro ayuno es el del chocolate y créanme no estoy sugiriendo que hagan éste ayuno. Usted elige su ayuno. Creo que es más poderoso si ayunas de las cosas que te alejan de Dios. El ayuno de los chismes, la ira, el egoísmo, la pérdida del  tiempo, los celos y la codicia son los más grandes. Algunas personas ayunan de mensajes de texto y deben hacer todo esto mientras conducen. Sea usted el juez de usted mismo, no es un concurso, sino un don de Dios. Como Vicentinos no juzgamos a los demás. Es dicho en todos nuestros talleres: ¡Nunca, nunca, nunca juzgues! Vicentinos amar y servir a Cristo en los demás.

¡Preparándose! – Yo no estoy hablando de prepararse para la primavera, aunque rezamos para que llegue pronto, no estoy segura acerca de usted, pero yo estoy cansada de buscar algo bueno en todo esto del mal tiempo, aunque reconozco que nos mantiene humildes. Estoy hablando de la Cuaresma y preparándonos todos como Vicentinos. Debemos estar orando y pensando en esto ahora. Oremos para mantenemos concentrados cuando el mundo nos distrae. Permitamos sólo la distracción de Dios en nuestros corazones. Oremos por nosotros para estar totalmente inmersos en el Espíritu Santo y la gracia de tener siempre a Dios ante nosotros. Oremos en nuestros corazones para que nuestras acciones siempre se conviertan a Dios y usted estará listo. Preparemos en nosotros ‘el camino del Señor’. ¡Prepárate para sus 40 días de adoración, amor y cambio!

Tengan una gran semana. Sigamos adelante, y sintamos el amor. Ustedes están en mis oraciones. Recuerden visitar: www.famvin.org/es y prepárese para buscar en el sitio. Hay tanta información, videos y enseñanzas. También puedes ver la Cuaresma en www.YouTube.com Os animo a ver la nueva película, «Hijo de Dios”. Es una cosa buena y una gran película. Ore que la oración ayude a cambiar el mundo.

Bendiciones,

Lynn