Brasil: Un minibús ofrece dignidad a los hermanos sin hogar
La Compañía de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl ha celebrado en 2023 el 400º aniversario de la inspiración recibida por su fundadora, Santa Luisa de Marillac, el 4 de junio de 1623, en la iglesia de Saint Nicolas des Champs en París. Ese día, Luisa, preocupada por su futuro y sus dudas de fe, tuvo una revelación sobre la creación de una comunidad dedicada al servicio del prójimo, emitiendo votos de pobreza, castidad y obediencia. Con Vicente de Paúl como su director espiritual, Luisa fundó en 1633 la Compañía de las Hijas de la Caridad, dedicada a ayudar a los pobres, enfermos y niños abandonados.
Hoy, la Compañía continúa su misión en diversos proyectos, como el «Micro da Caridade» en Brasil, dirigido por las Hijas de la Caridad de la provincia de Recife. Este proyecto nació en respuesta a la creciente vulnerabilidad de las personas sin hogar y la inseguridad alimentaria agravadas por la pandemia del Covid-19. Las hermanas, impulsadas por el carisma vicentino y la invitación del Papa Francisco a ir a las periferias, decidieron ir más allá de sus actividades habituales para atender estas necesidades urgentes.
El proyecto «Micro da Caridade» consiste en un minibús equipado con duchas, enfermería y barbería, financiado internacionalmente, para proporcionar servicios higiénicos esenciales a personas sin hogar en Recife. Cada semana, voluntarios de diversas áreas, incluyendo conductores, peluqueros, enfermeras y médicos, donan su tiempo para ofrecer baños, ropa limpia, productos de higiene personal, apósitos y una comida a aproximadamente sesenta personas. Además, proporcionan orientación sobre centros de asistencia y ayuda en la reorganización de documentos personales, siguiendo el principio cristiano de asistencia humanizada.
Las Hijas de la Caridad buscan proclamar el amor misericordioso de Dios a través de su servicio, en colaboración con otras ramas de la Familia Vicenciana y organizaciones no gubernamentales, promoviendo la caridad y movilizando una red de servicios y asistencia a los pobres. El proyecto «Micro da Caridade» se alinea con el tercer objetivo de desarrollo sostenible, que es promover la salud y el bienestar.
Los beneficiarios del proyecto se sienten acogidos y tratados con dignidad, y la difusión del proyecto se realiza principalmente de boca en boca, aumentando semanalmente el número de personas asistidas. Aunque esta iniciativa no es exclusiva de las Hijas de la Caridad, ya que existen otras similares coordinadas por grupos religiosos y ONG, todas tienen el objetivo común de devolver la dignidad a los marginados y olvidados por la sociedad.
Las Hijas de la Caridad están comprometidas a ayudar a personas sin hogar de todas las edades que enfrentan diversas formas de pobreza, como la soledad, el abandono y la invisibilidad. Inspiradas por sus fundadores, continúan respondiendo al llamado de servir a Cristo en los pobres, ofreciendo ayuda práctica y manteniéndose fieles a su misión de caridad y servicio desinteresado.
Con informaciones de Vatican News. Lea el artículo completo aquí.
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