El señor Bailly [...] me ha hablado sobre todas las tribulaciones que la Sociedad [de San Vicente de Paúl] ha tenido...

El señor Bailly [...] me ha hablado sobre todas las tribulaciones que la Sociedad [de San Vicente de Paúl] ha tenido...
Tal vez sea una mala alianza la de los católicos con la burguesĆa vencida; serĆa mejor apoyarse en el pueblo, que es...
En cierto sentido, el fin que nos proponĆamos en ParĆs no es absolutamente el mismo que se proponen ustedes en...
Representantes del pueblo, Respetamos la grandeza y la dificultad de vuestros deberes. Nosotros no somos de esos que, por la temeridad de sus acusaciones, tienen la desgracia de debilitar el Ćŗltimo poder capaz de salvar a la sociedad. Vosotros proseguĆs, con justa...
Ricos, El que nos ha enseƱado a pedir el pan de cada dĆa, nunca nos aconsejó asegurarnos diez aƱos de lujo. Vivimos en dĆas sin ejemplo, en los que puede ser sabio sacrificar el futuro al presente y la economĆa a la necesidad. [ā¦] Dad la limosna del trabajo, y dad...
Sacerdotes, no os ofendĆ”is por la libertad de unas palabras laicas que hacen una llamada a vuestro celo [ā¦]. Desconfiad de vosotros mismos, de las costumbres de una Ć©poca mĆ”s apacible, y dudad menos del poder de vuestro ministerio y de vuestra popularidad. Se os debe...
[Si asĆ son ahora] los males, no de un solo distrito, sino de varios distritos de ParĆs; no sólo de ParĆs sino de Lyon, de Rouan, y de todas las ciudades manufactureras del Norte, [ā¦] Ā”imaginaros lo que traerĆ” el invierno, cuando la dureza de la estación suspenda lo...
Uno se aterroriza, y con razón, por esa multitud de niños que crecen para el desorden y para el crimen, sin otra educación que los ejemplos del cabaret y las tentaciones de la plaza pública. No es suficientemente conocido que en el distrito 12, cuatro mil chicos y...
En los desvanes infectos, y en los mismos descansillos en los que estƔn la pereza y el desenfreno, hemos visto las virtudes domƩsticas mƔs amables, con la delicadeza y la inteligencia que no siempre se encuentran bajo los techos dorados; un pobre tonelero,...
Por supuesto, el barrio de Saint-Jacques y el de Jardin-des-Plantes no dan siempre el espectÔculo de la misma desolación. Conocemos allà calles comerciales, casas pobres pero habitables, habitaciones estrechas pero bien cuidadas que conservan restos de una antigua...
No hablemos de los que tenĆan una suerte mejor [en la calle de Lyonnais], esos que tenĆan dos camas para seis personas, en las que se amontonaban en desorden sanos y enfermos, y chicos de dieciocho aƱos con chicas de diecisĆ©is. No hablemos de lo ruinoso de la ropa que...
A los dos lados de un riachuelo infecto se levantan casas de cinco pisos, de las que algunas albergan hasta cincuenta familias. Habitaciones bajas, hĆŗmedas, nauseabundas; [ā¦] ningĆŗn papel, y a menudo ningĆŗn mueble, esconde la desnudez de sus tristes paredes. En una...