En este conmovedor testimonio en video, Mary Davoren, voluntaria comprometida de la Sociedad de San Vicente de Paúl y miembro activa de la Asociación Internacional de Caridades (AIC) en Irlanda, comparte su experiencia personal durante la Segunda Convocatoria Vicenciana celebrada en Roma en noviembre de 2024.
Desde una profunda vivencia vicenciana, Mary relata cómo este encuentro transformador reunió a miembros de la Familia Vicenciana de todo el mundo bajo el lema «Mantener encendido el fuego para ser peregrinos de la esperanza: la sinodalidad vicenciana en acción». Su testimonio destaca la belleza del encuentro fraterno, la inspiración recibida de la homilía del Papa Francisco en la Jornada Mundial de los Pobres y la llamada a vivir una fe que se traduce en acciones concretas.
Mira este video y déjate inspirar por su testimonio: una voz de esperanza, servicio y compromiso renovado con los más pobres.
Texto del video:
Me llamo Mary Davoren, y soy de Irlanda, donde soy miembro voluntario de la Sociedad de San Vicente de Paúl en una Conferencia de Visitación cercana a mi casa, en el oeste de Irlanda.
También soy miembro de la Asociación de Caridades Internacionales en la rama de Ballyfermot, una de las dos ramas en Dublín. La otra rama es la de St. Peter’s Phibsborough, que alberga el Santuario Nacional de la Medalla Milagrosa. También hay una rama de la AIC en Belfast.
Asistí a la II Convocatoria Vicenciana en Roma del 14 al 17 de noviembre de 2024 con el tema «Mantener el fuego encendido para ser peregrinos de esperanza: la sinodalidad vicenciana en acción».
La Convocatoria me pareció una experiencia enriquecedora, vivificante y fortalecedora del compromiso. Conocer a otros y participar con personas de diversas nacionalidades y ramas de la Familia Vicenciana que están comprometidos en diversas actividades al servicio y para la mejora de las vidas de los pobres de muchas maneras diferentes fue realmente inspirador.
Siento que la Convocatoria resucitó un mayor compromiso en todos los asistentes para seguir adelante con espíritu renovado, respondiendo a la llamada del Papa Francisco durante su homilía de la Jornada Mundial de los Pobres a todos los cristianos a practicar una fe que inspire la acción.
Gen Verde Band en el Teatro Ghione y la misa de la Jornada Mundial de los Pobres, cuya homilía (cuyo tema fue La oración de los pobres se eleva a Dios – Libro del Eclesiástico 21:5) fue predicada por Su Santidad el Papa Francisco, fueron los momentos culminantes y memorables del evento.
El Papa Francisco nos desafió durante el transcurso de su homilía a mirar no sólo a los grandes problemas de la pobreza mundial, sino a las pequeñas cosas que todos nosotros podemos hacer cada día con nuestro estilo de vida; con nuestra atención y cuidado del medio ambiente en el que vivimos, frecuentemente afligido por la tenaz búsqueda de posesiones materiales y riqueza. Invitó a los cristianos a centrarse en las dos realidades de angustia y esperanza que siempre se baten en duelo.
Hoy, el Papa Francisco nos interpela en otro contexto y es que para cumplir el milagro de la resurrección de Jesús: «No debemos tropezar con el mañana, debemos construirlo, y todos tenemos la responsabilidad de hacerlo de manera que responda al proyecto de Dios, que no es otro que la felicidad de los hombres, sin excluir a nadie.»
Lee o descarga el documento final de la II Convocatoria de la Familia Vicenciana: “Mantener encendido el fuego para ser peregrinos de esperanza”.
0 comentarios