Como muchos de ustedes saben, nuestro Santo Padre, el Papa Francisco, lleva hospitalizado desde el 14 de febrero de 2025, debido a una neumonía bilateral y a una leve insuficiencia renal. A pesar de la gravedad de su estado, ha mostrado una ligera mejoría, sin nuevas crisis respiratorias y con parámetros hemodinámicos estables.

La Familia Vicenciana se mantiene unida en oración, pidiendo a Dios por la pronta recuperación del Papa.

Por favor, únase a nosotros cada día para presentar ante el Señor al Santo Padre pidiendo por su salud.

Oh Dios de infinita compasión,
Padre de los pobres y Pastor de todos,
presentamos a tu siervo, el Papa Francisco,
que soporta las tribulaciones de tu pueblo con corazón lleno de amor.

Como San Vicente de Paúl vio a Cristo en los enfermos y en los que sufren,
ahora vemos a Cristo en nuestro Santo Padre,
que, en su fragilidad, sigue sirviendo con incansable devoción.
Pon sobre él, Señor, tu mano sanadora.
Fortalece su cuerpo, renueva su espíritu
y concédele la paz que sobrepasa todo entendimiento.

Como San Vicente, ha marchado por el camino del servicio humilde,
levantando a los quebrantados de corazón, pidiendo justicia,
y acogiendo a los pobres con el amor de un padre.
Ahora, en este momento de necesidad, acógelo, oh Divino Sanador.
Restaura su fuerza, guía a sus médicos,
y que tu misericordia sea su consuelo.

Que María, Madre de la Iglesia,
interceda por su hijo fiel
para que se haga en él Tu santa voluntad
ahora y siempre.

Amén.

Fuente: Mark Pranaitis, C.M. 
Vincentian International Mission Services.