La canonización de Isabel Seton como primera santa nacida en Estados Unidos se celebró el 14 de septiembre de 1975. El proceso que condujo a este acontecimiento fue un largo camino que precisó de las oraciones y la entereza de muchas de sus discípulas de las Hermanas de la Caridad, así como de muchos devotos seguidores.

Todo comenzó el 22 de agosto de 1882, cuando el cardenal James Gibbons, arzobispo de Baltimore, después de celebrar misa en St. Joseph en Emmitsburg, Maryland, se dirigió a las Hermanas y dijo: «Esta mañana me he sentido alentado a iniciar la causa de canonización de la Madre Seton». Su declaración sirvió de inspiración a otros y la Causa fue secundada por miles de hombres y mujeres en todo Estados Unidos y en Roma. La archidiócesis de Baltimore llevó a cabo exhaustivos estudios sobre la vida y los escritos de Isabel Seton antes de que la Causa de la santidad de Isabel Seton pudiera ser presentada ante la Santa Sede.

El Papa Pío XII firmó el Decreto de Introducción de su Causa el 28 de febrero de 1940, 58 años después. El decreto fue el primer documento oficial publicado por la Santa Sede en inglés. Al año siguiente, la organización Mother Seton Guild comenzó a trabajar para promover la devoción a Isabel Seton y solicitar oraciones por su canonización.

La primera reunión de la Conferencia de las Hijas de la Madre Seton, celebrada en Emmitsburg en octubre de 1947, se propuso «fortalecer el vínculo de unión entre las congregaciones miembros y trabajar juntas en la promoción de la causa de la Madre Isabel Seton». A continuación se celebraron reuniones semestrales a las que asistieron las superioras mayores de cada congregación.

En 1957, la Sagrada Congregación de Ritos aprobó la documentación de la Causa y el 18 de diciembre de 1959 el Papa Juan XXIII declaró Venerable a Isabel Ana Seton. Los dos milagros requeridos para la Beatificación fueron aprobados en 1961. El Papa Juan XXIII presidió la ceremonia de Beatificación el 17 de marzo de 1963, proclamando Beata a Isabel Ana Seton.

Desde entonces hasta 1975, la Federación se dedicó casi exclusivamente a promover la causa de Isabel Seton, promoviendo actos en favor de la devoción a la futura santa, obteniendo firmas en apoyo de su canonización y supervisando la reedición de la primera biografía de Seton, escrita por el reverendo Charles I. White.

Todos estos esfuerzos dieron fruto cuando el Papa Pablo VI canonizó a Isabel Seton el 14 de septiembre de 1975 [Año Internacional de la Mujer y celebración del bicentenario en Estados Unidos]. Los miembros de la Federación, al preparar el acontecimiento, desearon que las festividades estuvieran marcadas por un espíritu de sencillez. Entre los regalos que la Federación entregó al Papa Pablo VI figuraba una contribución de 200.000 dólares a un Fondo contra el Hambre en el Mundo, librada en el Banco de Nueva York con el que habían estado asociados el marido y el suegro de Isabel. Sor Hildegard Marie Mahoney, SC (Nueva Jersey), presidenta de la Federación y lectora en la misa de canonización, fue la primera mujer en leer en una celebración eucarística papal. El presidente estadounidense Gerald R. Ford designó el domingo 14 de septiembre Día Nacional de Santa Isabel Seton, por ser la primera persona nacida en Estados Unidos reconocida como santa. Las celebraciones tuvieron lugar en todo Estados Unidos y Canadá.