“Alégrense los cielos y la tierra”

1Jn 2, 18-21; Sal 95; Jn 1, 1-18.

En este último día del año, la palabra que más resuene en nuestros corazones deberá ser “¡gracias!”.

Gracias Señor por tanto y por todo, porque nos dejaste llegar a este 2021, quizá con temor y dolor por los que nos dejaron, pero también con gratitud y esperanza. Gracias porque en medio de esta pandemia nos has enseñado muchas cosas buenas. Nos has enseñado a valorar la vida, la salud, la familia, el saber estar con los demás y disfrutar de los buenos momentos que nos trae la vida.

Si te es posible ve a Misa, da gracias. Busca un momento para reunirte en oración con la familia, quizá en la cena de hoy. Agradece a Dios por los que están a tu lado, díselo a ellos personalmente, un “te quiero” o aquello que salga de tu corazón, y agradece a Dios su presencia. Pídele también por los enfermos que están en los hospitales, enfermeras, doctores; por los que ya llegaron a su presencia, que ellos, desde allá, intercedan por nosotros.

Que este año que estamos por comenzar sea mejor para todos. Son los mejores deseos de quienes administramos este pequeño librito de Evangelio y Vida. Dios los bendiga y la Santísima virgen María los proteja. Amén.

Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Seminaristas del Seminario Vicentino de Tlalpan, Ciudad de México