Día de Oración y Ayuno Vicentino
06 de mayo 2014
Construir – Pan y Vino – Dios es Sensible – Abre nuestros ojos

Queridos Hermanos y Hermanas Vicentinas: Leyendo los cuentos de nuestros dos nuevos santos, siento que tenemos que ilustrar más sus historias. Necesitamos orar más a los nuevos santos para recibir su intervención y luego simplemente confiar en Dios un poco más. Mi frase favorita para mi esposo es: “No es acerca de ti…” Él se ríe. Él me hace bromas de muchas cosas, sobre todo de mi salud – y ambos reímos. Y no es que se burle de las cosas malas, sino que es una manera de disimularlas y poner la confianza en Dios. Si me enfado con él sin razonar, sugiere que lea la Biblia o la reflexión diaria. Y aunque me sienta mal, sé que él tiene la razón. El mejor regalo que recibimos de Dios es nuestra familia. A veces no podemos arreglar los matrimonios, ya que ‘se necesitan dos personas para bailar tango’ y tenemos que perdonar y olvidar y recordar que no se trata de ‘mí’. Dios es un socio en el matrimonio. No podemos ser petulante y pensar que si tenemos un buen matrimonio es ‘por culpa de Dios’ sino que debemos orar por todos los que no experimentan eso. Hay muchos matrimonios rotos con sufrimiento en ambos lados. Oremos por el matrimonio y oremos por los que están en la separación o el divorcio. Ellos necesitan nuestras oraciones. Oremos por los jóvenes y los niños del mundo. Amén.

Construir – Siempre siento que tenemos que construir con Dios lo que es importante y mantener el edificio en buen estado. Es su voluntad y su plan el que debe seguir. Esto significa que debemos rendirnos a Su voluntad. No podemos usar productos de calidad inferior para construir nuestra vida. Pronto aprenderemos recuentos de supervivencia en el seguimiento del plan; dificultades seguramente vendrán si intentamos hacerlo solos. Estamos construyendo nosotros mismos como siervos a los necesitados. Seguimos las enseñanzas de San Vicente y nos rendimos totalmente al plan. Esto nos permite dar de todo corazón a los necesitados dentro de nuestras comunidades, en nuestras calles, en la cárcel y en cualquier otro plan que Dios nos lleva. Si usted puede acostarse por la noche sabiendo que le hizo a alguien más su día un poco mejor, usted sabe que ha construido fuerte y se ha mantenido con el plan.

El pan y el vino – Cada vez que vamos a misa podemos abrir nuestro corazón a Jesús. Nos convertimos en parte de todo el milagro de la oración y la transformación del pan y el vino en Jesús. Sé que lo he dicho antes, pero siempre necesito recordatorios,   “Haga cada Eucaristía tan especial como la primero”. Reciba el Cuerpo y la Sangre de Cristo y verdaderamente haga una diferencia. Sé que él está allí. Hechos 2:25: “Porque David dice de él: ‘Veía al Señor siempre delante de mí; porque está a mi diestra, no seré conmovido’”. Podemosrefugiarnos en el Señor a nuestra voluntad siempre.

Salmo16 : 11 :»Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra siempre”. El camino es el cuerpo y la sangre de Jesús. No hay mejor camino. El mismo Señor tomó el pan lo bendijo, y luego lo partió diciendo: “Esto es mi cuerpo”; A continuación, tomó el vino y lo bendijo, y alzando la copa dijo, “Esta es mi sangre”. Él hizo esto por nosotros. Este pan y el vino en la Eucaristía es el Cristo que vive en cada uno de nosotros. Recuerde siempre la Eucaristía cuando Cristo parezca estar lejos de ti. Si usted tiene una gracia difícil recuerde su cuerpo y su sangre. Trate de recordar y volver a vivir la primera Eucaristía en su vida. ¿Es fácil para usted ver a Jesús en la Eucaristía? La transubstanciación es cambiar el pan y el vino en el cuerpo y la sangre y de continuar manteniendo su forma original. Nosotros también debemos ser transformados y llevar esto a todos los que servimos. Cristo está en aquellos a quienes servimos y todos los que conocemos y con quienes servimos.

Dios Sensible – Dios no causa la muerte. Él eligió enviar a su Hijo a morir por nosotros y por nuestros pecados. Jesús tuvo una elección y nos ha elegido a nosotros. Las personas se preguntan si hay un Dios en los tornados, las inundaciones y otras tormentas e incendios. ¿Dónde está Dios? ¿Por qué está matando a tanta gente? Él está con nosotros, y llora por nuestro dolor. Jesús llora también. La trinidad es sensible a nuestro dolor. Tenemos el dolor en el cáncer y el daño del nervio y muchas otras condiciones que ni siquiera conocemos. Podríamos despertar cada día con el dolor y sentir lástima por nosotros mismos. Sin embargo, creo que los que se despiertan cada mañana en la calle cambiarían de lugar con nosotros. Aquellos que no tienen suficiente comida para ellos y sus hijos tomarían nuestro lugar. La mayoría de nosotros sufrimos si tenemos que pedir ayuda y no es diferente para los que lo hacen llamándonos a nosotros. ¿Somos sensibles a ellos? Ellos no se ven bien sin trabajo y mendigando. ¿Creemos? Sea sensible a Cristo si viene a su puerta o le da una llamada de auxilio.

Abre nuestros ojos – Definitivamente tenemos todos los signos. Cada día nos da una oportunidad de hacer grandes cosas y sentirnos felices. Un abrazo, una sonrisa, un regalo de la bondad y la amistad, un oído comprensivo y dos ojos bien abiertos para ver a Cristo delante de nosotros. A veces tenemos que pasar de nuestra zona de placer hacia la vida para cambiar incluyendo la nuestra. San Juan Pablo II dijo: “¡Crea! No tengas miedo de creer.” después de ser elegido Papa. Recuerdo que dijo muchas veces, “No tengan miedo”. Y esto me lleva a través de muchos de los casos difíciles y desvíos en la vida. San Juan XXIII tenía un gran sentido del humor y me acuerdo de algunos de sus clips, sobre todo a partir del Vaticano II. El Padre James Martin SJ de USA, escribió algunas cosas hermosas en su blog: “No podemos tomarnos en serio. San Juan XXXIII descubrió que el Espíritu Santo era el encargado de cuidar de las cosas, por lo que sólo debe ir a dormir”. Jesús tenía un sentido del humor y se rió con sus discípulos y amigos. Necesitamos un sentido del humor para ser un ser humano y presentar a otros. Reír a menudo y amar a menudo. Abre los ojos al humor, el amor y las necesidades a su alrededor

Bendiciones,

Lynn